Darren McGrady, el exchef real que sirvió a la princesa Diana durante más de dos décadas, ha roto su silencio a los 63 años y sus revelaciones están sacudiendo los cimientos de la monarquía británica. En una entrevista explosiva, McGrady ha arrojado luz sobre la relación entre Diana y la actual reina Camila, dejando al público atónito y dividido.
Sus palabras, inicialmente diplomáticas, han desatado una tormenta en las redes sociales, donde muchos lo acusan de traicionar la memoria de la difunta princesa. Con comentarios sobre la coronación del rey Carlos I, McGrady afirmó que “el tiempo ha pasado” y que es posible honrar el presente sin olvidar el pasado. Sin embargo, sus declaraciones sobre Camila han causado revuelo, avivando viejas heridas y cuestionando su legado.
Durante años, McGrady mantuvo un silencio casi sagrado sobre Camila, pero ahora, tras sentir la presión de las reacciones a sus comentarios, ha decidido hablar. Ha descrito cómo, tras la muerte de Diana, la presencia de la princesa fue sistemáticamente borrada de los muros del palacio. “Es pura maldad”, dijo McGrady, señalando cómo las fotos de Diana desaparecieron gradualmente, sustituidas por los gustos de Camila.
La publicación de estas revelaciones coincide con el ascenso de Camila como reina, y los partidarios de Diana están vehementemente en contra de su legitimación. La figura pública de Camila, que había estado en proceso de rehabilitación, enfrenta ahora su mayor desafío. Los leales a Diana nunca aceptaron su reinado y las palabras de McGrady han reavivado su furia.
Con el eco de sus declaraciones resonando en los titulares, muchos se preguntan: ¿cómo afectará esto a la monarquía británica? La confianza pública, ya frágil, se encuentra en un punto crítico. En esta tormenta mediática, el futuro de la reina Camila pende de un hilo, y el legado de Diana sigue vivo en el corazón de millones.